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El desarrollo chakra es vital para el crecimiento personal y espiritual, ya que nos ayuda a despertar de las ilusiones en la vida que aceptamos inconscientemente como real … hasta que nuestro «tercer ojo» se abre, y empieza a buscar más allá del dualismo. La dominación de la dualidad (la aceptación inconsciente de que nuestras vidas son siempre una elección entre dos polos opuestos) sobre nuestra conciencia debe ser suplantada por una experiencia de múltiples dimensiones de la realidad.

La mayoría de las personas se contentan con aceptar las opiniones comúnmente admitidas de la realidad tal como se presenta y reforzada por los medios de comunicación populares, tales como programas informativos de televisión, películas y libros. Nuestra escolarización temprana nos enseña una visión simplista o infantil del mundo que a menudo se extiende. Para ello el desarrollo del tercero ojo chakra, se presenta con el fin de ver más allá si de lo que nos dicen es cierto, y para hacer nuestra propia evaluación. Pero cada vez el Agnya Chakra, a veces llamado el tercer ojo, requiere de mucho esfuerzo.

Una forma de desarrollar el tercer ojo es hacer las preguntas correctas. El desarrollo Agnya chakra se presenta cuando el niño pequeño se enfrenta a un padre o un profesor y le dice «¿Quién eres tú para decirme lo que soy y lo que debo pensar?»  Cada padre tiene que lidiar con estos desafíos que espera responder de manera amable, pero de manera firme y teniendo cuidado de no aplastar el espíritu joven de ellos. Preguntas similares aparecen diez años más tarde, impulsado por las hormonas revueltas del adulto joven. Pero debajo de estas dos etapas de desarrollo,  la rebelión infantil y adolescente de la confrontación con la autoridad,  el tercer ojo interno está empezando a abrirse, el desarrollo de la auto-investigación está comenzando.

Nadie puede decirnos lo que somos, en cuanto a nuestra identidad fundamental. Otros sólo pueden decirnos que quiere que seamos, o que piensen lo que deberíamos ser. Sí, los demás pudieran ver nuestro potencial, entonces podrían proporcionarnos un apoyo muy necesario. Pero, en última instancia, nuestro verdadero ser se descubre por sí mismo: a través de la auto-investigación, el desarrollo personal, y por el fuego de la transformación de nuestras relaciones personales. Estos tres factores constituyen la más maravillosa (aunque a menudo dolorosa) oportunidad, y nos traerá las herramientas para liberarnos de la “tiranía” de la realidad común.

El proceso de cuestionamiento de la autoridad exterior finalmente debe convertirse en la investigación interna de nosotros, o sea de quién te crees que eres, o que te han dicho que eres. Como adultos aprenderemos que tenemos poco poder para influir en los demás, o para cambiar los acontecimientos del mundo exterior. Pero tenemos un tremendo poder para cambiarnos a nosotros mismos. La puerta se abre a la libertad personal, cuando aprendemos a desarrollarnos, y llegamos a ver el significativo de la vida, aunque eso nos depare nuestros propios esfuerzos.

La llave que abre la puerta del desarrollo personal y espiritual es el hacer las preguntas correctas, y al hacerlo, además es para desarrollar nuestro Agnya chakra. Sin el funcionamiento del tercer ojo nos quedaremos ciegos (no física sino espiritualmente) a todas las profundidades espirituales y atrapados en la llanura aburrida de los opuestos polares. Esfuércese en abrir su tercer ojo. No se conforme sólo por la realidad construida y ofrecida a usted por los demás. Aprende a ver la verdad por sí mismo.

Desarrolla tu tercer ojo!