De forma que las vibraciones te penetren por dentro y por fuera. Además, cada vez entonarás un solo tono para revitalizar cada uno de los chakras individualmente.
Por la teoría de los armónicos sabemos que en cada tono están contenidos todos los demás, aunque nosotros normalmente no los percibimos conscientemente. Cuando vibra una cuerda (y también nuestras cuerdas vocales son como las cuerdas de un instrumento), no vibra sólo la cuerda entera es decir, el tono fundamental, sino que resuena también la mitad de la cuerda, es decir, la siguiente octava superior; y también resuenan los dos tercios de la cuerda, es decir, la quinta; y resuenan tres cuartos de la cuerda (la cuarta), y un quinto de la cuerda (la sexta mayor), y cuatro quintos de la cuerda (la tercera mayor), y cinco sextos de la cuerda (la tercera menor), etcétera.
Esto significa que toda la escala resuena como serie de armónicos.
Para nosotros, el conocer los armónicos que resuenan involuntariamente significa que, con cada tono que entonamos para un determinado centro energético, también se producirá un efecto.
Sobre todos los demás centros, de forma que cada vez, además de estimular un chakra individual, surgirá una armonía con todos los restantes centros energéticos.
¿Cómo realizar las meditaciones?
Ambas formas de la terapia por el sonido puedes efectuarlas sentado o de pie: si estás sentado, preferentemente en la posición de loto, o en la posición del sastre o del diamante (de rodillas, con el trasero apoyado sobre los talones).
La primera de las formas de terapia por el sonido que queremos exponerte aprovecha los tonos de la escala que están asignados a los chakras, así como las vocales del alfabeto, teniendo en cuenta que en la India la «m¨ también se considera vocal. Entona las vocales al espirar. Canta cada vocal tres veces con intensidad normal, dirigiendo tu atención al chakra correspondiente, y deja que el tono entre en resonancia en esa zona.
Comienza con el chakra radical y canta las vocales en el siguiente orden:
- «u» en do profundo para el primer chakra,
- «o» cerrada en re para el segundo chakra,
- «o» abierta en mi para el tercer chakra,
- «a» en fa para el cuarto chakra,
- «e» en sol para el quinto chakra
- «i» en la para el sexto chakra.
- «m» en si para el séptimo chakra.
En las vocales del alfabeto está contenido todo el cosmos. Te conducen hacia el interior y hacia el exterior, hacia abajo y hacia arriba, y están coronadas por la «m¨ de la unidad perpetua.
Puedes recorrer la escala entera una vez hacia abajo y una vez hacia arriba. Después, permanece un rato en silencio como se ha descrito, y deja que resuenen las experiencias.